En esta fecha conmemorativa es un día de reconocimiento a las mujeres que, con su lucha y esfuerzo a lo largo de estos años, han hecho posible que hoy vivamos en una sociedad más libre e igualitaria.
Desde nuestra humilde posición nos gustaría agradecer a todas estas mujeres su esfuerzo y en especial a aquellas que desde una posición más cercana para nosotras han sido nuestro ejemplo a seguir:
-
como nuestras abuelas:
Adelaida, que a pesar de las dificultades de haber nacido en 1929 en una casa aislada de la sociedad y sin acceso a la escuela, con esfuerzo y compromiso, de forma autodidacta aprendió a leer y escribir y consiguió con 18 años su primer trabajo en el registro civil del pueblo más cercano.
Juliana, que a pesar de haber nacido en el seno de una familia muy tradicional de principios del s XX, de esas que te educaban para ser ama de casa o monja, forjó su propio destino, aprovechando lo mejor de lo bueno y sacando lo bueno de lo malo, consiguió cumplir su sueño de hacer las américas y ofrecer un próspero futuro para ella y sus hijos.
-
a nuestra madre y tías:
Graciela, Silvia, Adriana y Carmen:
que contra los estereotipos de su época, nunca renunciaron a su independencia económica y desarrollaron sus carreras profesionales, incluso en profesiones tan masculinizadas como la agrónoma, sin dejar de darnos la educación, el amor y cariño que nos ha ayudado a ser las mujeres que hoy somos.
A todas ellas GRACIAS, tomamos el relevo, y seguimos con un trabajo en equipo, porque la lucha continua.
Sofía y Marisol.